La vida por tus besos
La vida es de quién sabe hablar y
la muerte de quién sabe esperar.
Por eso estoy aquí:
desesperado por verme morir;
de viejo, de sonámbulo, de torpedo.
Canto una canción para ti,
en tus besos me quedo,
¿qué será sin ti?:
osuna, omea, caremi,
catina, osuna, camei...
En tu te quiero, una caricia
y en mi amor: una rebelión.
¿Por qué canto tan secreto?;
porque es necesario la Unión.
En tus manos canto, querido hermano,
la verdadera esencia del deskontrol.
En tus manos canto, querida hermana,
la verdadera esencia de la insumisión.
Oea oao oae,
oao oea oe...
Canto de trompetas a la mañana,
canto de dolor al amanecer;
¿qué es el canto del amor al amar?
Una conclusión te he de contar:
En mi vida vi un sonámbulo,
¿qué es querer de ti?
En mi vida vi un noctámbulo,
¿qué es querer de ti?
En la noche se alza druídico,
¡qué clamor hay de ti?
En la noche se lanza druídico,
¡qué querer de ti!
Cuando la noche es bella
es beber de ti
pero, por supuesto,
es mejor saber
que se puede confiar en ti.
Apolo y la lira
La canción de tu caricia,
es de esperar a ti, bombón;
de un te quiero, de una carestía,
de una Revolución.
Es pedir, porque te quiero,
que hables por mí
en los altos tribunales
de la Inquisición:
“Yo solo soy un pecador,
un truhán malhechor,
que si fuera por la vida alegre
sería un mamón”.
Pero lo soy y con orgullo,
que a mí todo me pone
y das de liras
al follón,
pero “Abracaen mamin parquetrumen”
me siento y casi-chico
soy yo.
Media lira y un Sol
En ti,
sin ti.
Por tus besos,
por una actitud.
Mitad punk,
mitad Skin,
anarkopunk hasta la médula y
sin fin.
En tu corazón queda baldío
el rencor de un poeta que supo escuchar
y que ya no se frena
ante el capital.
¿Qué sueño será el mío,
si soy un vulgar desconocido?,
en mi sangre queda un honor y
una desdicha.
Por mi fuero va corriendo un manantial,
¡un maquis preso en Alcatraz!
Por eso me siento Perpetuo,
un Guardián
y un beso en el interior de mi Templo.
-Richie punk-