¡VIVIMOS COMO DIOS MANDA!
Tenemos una televisión que nos educa,
deporte diario, música eléctrica
nos hace cosquillas en las plantas
de los pies.
Semana Santa en Sevilla,
corrida de toros, Dios nos perdone
si asesinamos a esto animales de lidia,
nos confesamos; nuestra alma queda "pura"
como el agua del Manzanares...
Tenemos escuela católica
para nuestros hijos,
escuela laica no hay ninguna
existía cuando mi padre era niño,
hoy todo ha cambiado
VIVIMOS EN DEMOCRACIA
El paro abunda, los patronos cristianos
dicen que hay para rato y
que no hay milagros!
Tenemos los narcóticos
y las madres de las chicas y chicos
drogados,
se manifiestan todos los días
ante la indiferencia de los Cristianos.
Cuando están cansadas,
se van a la iglesia,
el cura echa su sermón
en espera del milagro
¡Pobres madres!
Si vuestros padres levantaran la cabeza dirían:
¿Esto es el progreso?
Por Manuel LOZANO - Poeta andaluz y anarquista
Ráfagas poesía selecta - octubre de 1993
Fundación Pedro Flores
ESTRELLAS LUMINOSAS
Una estrella blanca y luminosa
fuera del terciopelo negro sideral
se vistió con salpicaduras brillantes
para iluminarme el camino
de obstáculos y oscuro
que persigo con esperanzas
de un cierto futuro;
el que se añora cada día
y cada instante sin cansancio
y sin olvido buscando
las raíces del bien y del mal,
tratando de hallar entre ambos
adjetivos aquel que
pueda mejor la mente
iluminar y nutrir las entrañas
-con tierra y con mar-
huecos vacíos que hay que
llenar y vaciar, para nuevamente
rellenar como función corporal
para poder vivir, crecer y
desarrollar.
Otra estrella palpitante
del confín boreal
me señaló la senda del
bien y del mal, pues su brillo
nítido me encendió
el origen del amor
entre hembra y varón,
entre amigos y vecinos
y entre todos en general,
el que nos ofrece el Universo
y el mundo sideral formado
por luceros, astros, planetas
galaxias, vía láctea, satélites
y tantos misterios sin igual,
el que la Natura nos da
sin recompensa alguna
como ofrenda al que todo
lo puede alcanzar...
Otra más me esclareció
con su fuerza diamantina
mi espíritu nubladizo
que huracanes malignos
trataban de cegar,
mas el calor del astro solar
que da fuerzas y energías
para vivir y luchar
y poderlo todo alcanzar,
destruyó el espíritu del mal.
El fulgor luminoso
de otra estrella
me dio esperanzas para
continuar sin desmayar
por el camino de la vida,
observando y penando,
analizando que entre
el bien y el mal
hay que saber escoger...
lo que al corazón purifica
y beneficia y al espíritu
reconforta, engrandece,
ennoblece, honra y dignifica
y que llamamos : AMOR, PAZ Y FRATERNIDAD
Felix Alvarez Ferreras
Ráfagas poesía selecta - octubre de 1993
Fundación Pedro Flores